Hacks para posicionarse en redes sociales
Crear una red social y subir contenidos es fácil, pero posicionarse, ganar seguidores y obtener beneficios de ella requiere de mayor esfuerzo. Para empezar, posicionarse en redes sociales consiste en que tu cuenta destaque de otras en las búsquedas de tus potenciales clientes, algo que definitivamente necesita de un plan estratégico.
De hecho, en este punto es donde los emprendedores comienzan a sentir frustración y abandonan sus objetivos publicitarios.
¡No hay que desmotivarse! Afortunadamente, no es imposible posicionarse en redes sociales. En este artículo, vamos a explicar todos los hacks infalibles para lograrlo.
Índice
- Planifica el contenido con anticipación
- Publica contenidos de buena calidad
- Conoce tu audiencia
- Trabaja en el branding de tu marca
- No centrarse sólo en vender
- Analizar la competencia
- Impulsar los contenidos con SEO
- Abre nuevos canales
- Conclusiones
Planifica el contenido con anticipación
Un error muy frecuente entre los emprendedores es publicar contenidos a medida que son creados. Es así como podemos encontrar un feed repleto de publicaciones en lapsos cortos de tiempo y luego varios días (o semanas) en las cuales no hay ninguna publicación.
La planificación es una buena manera de posicionar marcas en redes sociales, principalmente porque organiza los tiempos de diseño y permite establecer una estrategia publicitaria. Vamos a repasar cuáles son las ventajas de hacerlo:
- Frecuencia de publicación: al programar las publicaciones planificadas con antelación, siempre van a haber nuevos contenidos para tu audiencia.
- Mejor calidad de contenido: cuando dedicamos más tiempo a diseñar contenidos, generalmente son de mejor calidad y más enfocados en nuestros objetivos.
- Aprovechar oportunidades: crear un calendario de publicaciones también permite detectar fechas especiales o festivas de las cuales puedes sacar provecho para captar audiencia.
- Optimizar el tiempo: posicionar marcas en redes sociales es una tarea ardua y constante. El ahorro de tiempo que supone programar publicaciones se puede aprovechar en responder mensajes, interactuar con la audiencia y tareas relacionadas al negocio.
Publica contenidos de buena calidad
Las imágenes de baja resolución o con diseños poco atractivos difícilmente van a lograr un buen posicionamiento en redes sociales. En el momento de crear las publicaciones, recomendamos incluir elementos nítidos, sin marcas de agua y que sigan los lineamientos de tu marca.
De hecho, es preferible reducir la cantidad de publicaciones, pero que las mismas tengan una resolución adecuada y sean atractivas para tu público. Recuerda que la consistencia es importante, pero nunca a expensas de la calidad.
Con el tiempo, podemos notar que ciertos diseños tuvieron más impacto que otros a través de las métricas de las redes sociales. Con esta información, podemos ajustar la estrategia en función de lo que da mejores resultados y descartar aquellos que tuvieron escasas interacciones.
Por lo general, acceder a plantillas y recursos visuales no es una tarea difícil. Afortunadamente, existe una amplia variedad de bibliotecas online donde puedes descargar miles de imágenes en alta resolución.
Conoce a tu audiencia
Si buscas posicionarte en redes sociales, es obligatorio tener conocimiento de quiénes siguen tus cuentas y cuáles son sus intereses.
Por ejemplo, si tienes una tienda online de vinos, debes establecer quiénes comprarían este producto: ¿son adultos o adolescentes? ¿compran botellas para festejos y reuniones sociales o para degustar en su casa?
Para resolver este problema, una de las primeras tareas es investigar a quién puede interesarle tu negocio. No es necesario ser un detective, sólo basta con saber más de los clientes que te han comprado o aquellos que se hayan interesado.
Volviendo al ejemplo de la tienda de vinos, puedes determinar que el sector más interesado son hombres entre 35 y 45 años. Algunos de ellos hicieron cursos de sommelier y buscan comprar marcas para sumar a sus propias colecciones. Es así como puedes planificar contenidos de valor relacionados a la cata, regiones vitivinícolas que producen los vinos en venta o unboxing de cajas.
Una práctica habitual es crear un “buyer persona”, el cual representa un cliente promedio ficticio que comparte las mismas motivaciones y miedos que tu audiencia.
Trabaja en el branding de tu marca
El branding engloba un conjunto de acciones en las cuales se establece la identidad o “esencia” de una marca. Aunque puede parecer innecesario, el branding es el corazón de una empresa y es lo que establece una conexión con la audiencia.
En un mundo tan competitivo, es esencial destacar del resto de las empresas del sector, lo cual también ayuda a que las personas puedan identificar tu marca con facilidad.
Uno de los ejemplos más conocidos de branding es la cadena de cafeterías Starbucks. Todos sabemos que el sector del café está repleto de empresas que compiten entre sí, por lo que esta compañía decidió diferenciarse a través de su mensaje.
De hecho, sus cafés suelen ser más caros que la competencia, pero aún así han tenido éxito. ¿Cómo lo lograron?
El hack se encuentra en el valor de su marca, la personalización y el sentido de pertenencia que muchas personas tienen al consumir sus productos. No solo compras café, también adquieres un momento relajante, con un ambiente diseñado para el confort del usuario.
Para lograr un buen posicionamiento en el mercado es necesario crear una identidad alineada a los valores de tu marca (ya sea personal o comercial) y reflejarlos en tus contenidos en redes sociales.
No centrarse sólo en vender
La mayoría de las personas aman comprar y gastar dinero en productos o servicios, pero no les gusta que les vendan. Parece una contradicción, pero la realidad es que al cliente le gusta pensar que compra por voluntad propia y no por “dejarse convencer” por un tercero.
Por este motivo, las publicaciones típicas con carteles rojos que incitan a la compra ya son menos frecuentes. Si buscas un buen posicionamiento en Instagram, Facebook y otras redes sociales, debes buscar un equilibrio entre las distintas categorías de contenido:
- Informativo: sirve para asesorar y brindar datos importantes a tu audiencia. Pueden estar apoyados en estadísticas y números verificados sobre un tema en particular. Por ejemplo, un contador que busca posicionar su marca personal puede brindar información sobre la situación de los mercados y predicciones de interés.
- Educativo: va un poco más allá del contenido informativo, ya que sirve para enseñarle algo a la audiencia. Puede estar dirigido a demostrar cómo manipular un producto de la tienda o cómo sacar provecho a una herramienta web. En los casos de especialistas en Marketing, resultan muy frecuentes los videos cortos donde enseñan a utilizar recursos gratuitos.
- Entretenimiento: el objetivo de estos contenidos es atrapar la atención de la audiencia, lo cual también favorece la interacción. Suele usarse como “anzuelo” para que luego continúen navegando en las redes sociales y puedan familiarizarse con ellas.
- Publicitarios: aquí es donde vamos al grano y ofrecemos los productos o servicios que nos interesa vender. Por lo general, estos contenidos recurren a la inmediatez (“¡Stock limitado!”, “¡Último día de ofertas!”) o a los puntos de dolor (centrarse en una preocupación del potencial cliente que el producto en venta puede resolver)
Analizar la competencia
Si buscamos posicionar las redes sociales en un sector determinado, tenemos que conocer a la competencia. Para definirlo con propiedad, decimos que una competencia es aquella marca que ofrece el mismo producto, busca reemplazar el producto que ofreces o tiene por objetivo satisfacer las mismas necesidades.
Por ejemplo, un diseñador que busca promocionar su marca personal en redes sociales podría estar compitiendo con otros diseñadores gráficos o con softwares que comparten plantillas personalizables.
Para empezar, debemos saber cuál es la marca que está mejor posicionada y cuáles son las acciones que realiza diariamente para lograrlo.
También tenemos que plantearnos las siguientes preguntas:
- ¿Qué tipo de productos y servicios ofrece?
- ¿Cómo los difunde a través de redes sociales?
- ¿Cuáles son los contenidos que tuvieron más impacto en la audiencia?
- ¿Qué tipo de temas comparte y difunde?
De esta manera, puedes detectar fortalezas y debilidades de tu competencia, lo cual también te ayudará a saber en qué aspectos trabajar y así elaborar una estrategia efectiva.
Impulsar los contenidos con SEO
SEO significa “Search Engine Optimization” o traduciendo al español: Optimización para motores de búsqueda. Esto quiere decir que el SEO está orientado a producir el “match” entre un usuario y la marca que ofrece una respuesta.
Por ejemplo, un usuario que busca aprender inglés puede llegar rápidamente a academias que comparten contenidos relacionados a cursos o talleres de idiomas. Sin embargo, el instituto debió encargarse de informar en sus redes sociales utilizando palabras clave específicas.
Por este motivo, el posicionamiento SEO en Instagram y otras redes sociales se consigue teniendo conocimiento de lo que vamos a escribir y cómo hacerlo. Un copy optimizado con abundantes palabras claves y hashtags en tendencia es más visible para las personas que buscan contenidos específicos y por ende, genera más tráfico.
En Instagram y Facebook, se puede sacar provecho de tu biografía para indicar en pocas palabras a qué se dedica tu marca y que contenga palabras clave fáciles de buscar. El nombre del negocio también tiene esta finalidad, ya que aumenta las probabilidades de aparecer en los motores de búsqueda.
Si una persona busca “café” en Instagram, inmediatamente va a encontrar todos los negocios que tienen esa palabra en su nombre de usuario.
Además, también es fundamental saber usar los hashtags como palabras clave en los contenidos. Éstos no son más que etiquetas que sirven para atraer un público más amplio que está interesado en cierto sector. Actualmente existen muchas herramientas que ayudan a crearlos como Metricool y Hashtracking.
Abre nuevos canales
No debemos conformarnos con las redes sociales, aún cuando nuestro objetivo sea posicionarnos en ellas. Una marca con autoridad debe saber aprovechar todos los canales disponibles. A continuación, veamos algunos ejemplos:
- Sitio Web: además de ofrecer los productos o servicios, un sitio web puede ser un portal para compartir artículos a través de un blog y ganar suscriptores que contribuyan a tu base de datos de potenciales clientes. Esto no solo te ayuda a establecerte como una autoridad en tu sector, sino que también mejora el SEO de tu sitio web, lo que facilita que las personas te encuentren a través de motores de búsqueda.
- Podcasts y Webinar: es una excelente manera de ofrecer contenido de valor a tu audiencia y ganar nuevos suscriptores en tus redes sociales. Por lo general, son bien recibidos cuando se trata de temas interesantes y que tiendan a resolver necesidades. Por ejemplo, una especialista en nutrición puede organizar un webinar sobre dieta vegana para atraer a este público específico. Al finalizar la jornada, puede hacerles la invitación a suscribirse y seguir otras publicaciones.
- Newsletter: el marketing por correo electrónico todavía es muy efectivo y podemos aprovecharlo. Los newsletter son mensajes que pueden difundir contenidos exclusivos y ofertas que sólo estarían disponibles para seguidores de redes sociales. Si tienes una buena base de datos de tus suscriptores, también vas a tener acceso a mucha información valiosa de tu audiencia y vas a poder adaptar mejor tus estrategias publicitarias.
Conclusiones
Para finalizar este artículo, podemos decir que posicionarse en redes sociales es una tarea que requiere voluntad y constancia. No existen recetas que nos garanticen el éxito, por lo que recomendamos ser observadores y aprender de la audiencia.
El principal indicador de que las cosas están bien hechas es el público, y en definitiva, es el que termina definiendo el posicionamiento de la marca en redes sociales.
Por eso, mantener una presencia activa y comprometida en las redes sociales, ofrecer contenidos de alta calidad, interactuar con los seguidores y medir y ajustar constantemente tu estrategia son pasos clave para construir y mantener una posición sólida en las redes sociales.